CARTA ABIERTA AL SR. BARACK OBAMA, PRESIDENTE DE LOS ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMÉRICA.
Distinguido señor:
Pienso, creo
que como todo el mundo, que es necesario detener los crímenes de lesa humanidad que está
cometiendo el dictador sirio Bashar al-Asad, ordenando aniquilar a los rebeldes
en su país, ya sea con armamentos de guerra convencionales o de guerra química,
esta que fue inmediatamente prohibida después de su primer uso por los alemanes
contra los franceses, en 22 de abril de 1915.
Y estas
masacres que está cometiendo Asad, la única nación que las puede parar es la
más poderosa del mundo, USA, deteniendo
el asesinato de lesa humanidad, que se está cometiendo con miles de civiles y
entre ellos niños y mujeres sirios y de otras regiones habitantes en ese país. Ud.
puede detener esta tragedia que sucede en Siria pero que duele a toda la
humanidad.
Y Ud. lo puede
lograr bajo la aprobación oficial de su Congreso, y si es posible acudiendo lo
más pronto posible al Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones
Unidas y su pleno, en una reunión de emergencia, para que, también, lo apruebe,
y poder dar fin a tan cruel derramamiento de sangre inocente, y evitar la
extensión del conflicto, por intereses creados de naciones adláteres al
estratégico país.
De ser
aprobado este llamamiento de socorro a un país miembro, la intervención deberá
ser mediante sus fuerzas armadas
convencionales, pero de altísima tecnología, sin riesgo de vidas de ningún lado. Entiendo que de hacerlo
deberán ser sus ataques exclusivamente a los más vulnerables y peligrosos
campamentos de armamento sofisticado que tiene Siria.
No hay duda
que las habilidades inteligentes y hasta diplomáticas de su Jefe de Estado Mayor Conjunto, Gral. Martin Dempsey, y Chuck
Hagel, su Secretario de Defensa, tomarán la decisión, con los estrategas de la
zona, en que considero deberá considerarse una estrategia disuasiva.
Supongo que
ya, o cuando lo autorice su congreso, de ser necesariamente así, se deberá
enviar sus aviones espías no tripulados de última generación, que informarán
fielmente sobre los complejos sirios, los campos referidos a instalaciones de infraestructura de guerra, de ejércitos en
armas y de población civil en riesgo, y, al mismo tiempo, las zonas de
población civil cercanas, todas las cuales que deberán ser respetados íntegramente, por
ser de familias inocentes.
Por supuesto,
es de considerar que su ataque no habrá de tener un fin político, ni de
hecho declaratorio de guerra, sino y
exclusivamente un carácter plenamente humanitario, con el fin de cuidar a toda
la población siria, con sus diversas etnias y fes religiosas, inclusive a los propios rebeldes y tropas de
soldados, quienes son víctimas de tener que cumplir las órdenes del criminal dictador.
Consideramos
que su intervención deberá ser
estratégicamente planeada, iniciándola con un perfecto lanzamiento punta de
lanza, no masivo, que certifique la precisión del ataque sin bajas humanas
civiles y con un mínimo de víctimas de las fuerzas militares que son fieles, obligatoriamente a la fuerza,
del genocida mandatario sirio.
Si la acción
persuasiva inicial paralizara los ataques militares de Asad, también habrá que
disuadir inteligentemente a los rebeldes a cesar su lucha, y conseguir que la
ONU envíe una dotación de cascos azules para mantener la paz. Derrocar al dictador
puede provocar algo similar a los sucesos de Egipto. La inteligencia americana deberá
evaluar eventualidades.
Nadie puede
ser fiel a un gobernante dictatorial que prácticamente tiene esclavizado a su
pueblo y viviendo en profunda crisis, donde no se respetan los derechos humanos
y donde hay sectores con millares de personas que viven en las peores
condiciones de pobreza y hambruna, además de otras peripecias.
Todo el mundo
debe abogar porque se respeten los derechos humanos fundamentales y
democráticos del hombre de todas las naciones, luchando sabiamente contra
quienes abusen del poder para tener sojuzgados, impotentes, discriminados y en la miseria a pueblos, bajo las armas de sus gobiernos
dictatoriales.
FERNANDO RIVERA LAZO Presidente
Fundador PERIODISTAS DEL MUNDO UNIDOS
POR LOS DERECHOS
HUMANOS
Comentarios
Publicar un comentario